Sigo
No supe si escribirte o llamarte. Si llamar para avisarte que te había escrito o escribirte para avisarte que quería hablar. Daba igual, la opción correcta era simplemente seguir al corazón. ¿Al tuyo o al mío? Al de los dos. Y bueno, que también se me complicaba llamarte para decirte que no quería hablarte más.
- Hola, sólo quería decirte que después de todo -que fue casi nada- decidí que contigo o sin ti son la misma cosa.
Algo así como tú eres nadie, pero de pronto me lo planteé al revés. Nadie es tú.
Ring. Ring.
- Lo sentimos, el hombre que usted amó no existe.