ʻōteʻa

El cabello cayendo por los hombros y la mano pasando por el cuello. Caminar cuando ya llovió sobre mojado. Té de coco, agua de fresa. Tu separador de rosa recuerda la página que con una frase tiró tu orgullo y tu soberbia para cambiarlos por existencia verdadera. Anillo marino, anillo de madera. Brazo alrededor de tu cintura, si vienes de su costilla es porque nada hay más cercano a su corazón. La memoria y la sonrisa, el olvido y el vacío. La guitarra en la fuente, peces en tus mejillas. Quieres mucho y amas a pocos. Se enfría el silencio. Riqueza es tener tanto, riqueza es anhelar nada. Nada es lo más poco que hay y aún así te lo recibo. Viento que sacude los nubarrones de tu frente y el aleteo de tus pestañas mariposas. Palabras en harapos y te despojas de cuanto te han prometido. Todo se transforma y tus ojos inquietos ven. Luna llena, lunar nuevo. Las carencias son simplemente la libertad de no poseer. No poseer más que la esperanza en un mundo desesperao' es voltear el norte al sur y viceversearte las señales, esas que nunca te dan razones pero siempre traen paz
y una vida invariablemente más linda.

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